1914 es una fecha marcada en la historia por el comienzo de la Primera Guerra Mundial, pero buscando efemérides más agradables, también es el año en el que Royal Enfield comenzó a producir motos con sus propios motores tras varios años fabricando unidades en las que se empleaban motores comprados a segundas empresas. Ahora, 117 años después coincidiendo con la llegada de la Royal Enfield Meteor 350, prácticamente todo ha cambiado en el mundo de la moto y también dentro de la firma cuyo origen fue británico y que desde hace décadas proviene de India.
Eso sí, conviene destacar la palabra prácticamente porque lo cierto es que las Royal Enfield siguen manteniendo ese estilo de moto clásica pero sus modelos van avanzando con algunos toques de tecnologías más modernos que les permite adaptarse no solo a las necesidades de los usuarios sino también a las nuevas normativas. Precisamente el último de esos modelos lanzados -la Royal Enfield Meteor 350-une el concepto clásico con un concepto muy pragmático que nace después de haber estudiado las tendencias del mercado en los últimos tiempos.
Esa unión no es sólo a nivel de fabricación y diseño, sino que también tiene un toque de nostalgia con el pasado en su nombre. Para los más seguidores de la marca, la palabra Meteor no será nueva, ya que en los años 60 ya hubo una moto que llevó ese nombre al que ahora se ha añadido el apellido 350. Con esa unión, el resultado es una moto que pudimos probar en primera persona en la presentación nacional organizada por Royal Enfield y que nos dejó unas buenas sensaciones tras haber podido pasar unas horas sobre ella que fueron suficientes para poder analizar detenidamente el comportamiento de la moto. A modo de “spoiler” antes de pasar al resto de la prueba, diremos que el resultado de ese análisis nos sorprendió positivamente…
La Royal Enfield Meteor 350 es una moto claramente destinada al público del carnet A2
Antes de subirse a la nueva Royal Enfield Meteor 350 hay que tener claro que se trata de una cruiser urbana de acceso con todo lo que ello conlleva. La moto está diseñada para que su conducción sea sencilla y útil sobre todo en un entorno urbano y del día a día, aunque eso no significa ni mucho menos que no pueda defenderse bien en otros escenarios como el que nos encontramos en la presentación nacional en la que pudimos disfrutar de un recorrido rutero por la zona norte de Madrid. De esta manera, además de ser una moto sencilla y accesible es una moto versátil con la que se puede ir todos los días al trabajo, ir con tu amig@ al cine o salir de excursión a la montaña por poner algunos ejemplos.
El corazón de la Meteor 350 es su nuevo motor monocilíndrico de 349 centímetros cúbicos de capacidad que alcanza los 20,2 CV de potencia y los 27 Nm de par. Estas cifras modestas juegan a favor de poner en el catálogo de la marca una moto ideal para los usuarios sin experiencia que tienen el carnet A2 y también ayudan y mucho a mantener el consumo a raya y con ello, mantener el gasto lo más contenido posible. De esta manera, la moto que está ideada para ser la moto de acceso a la gama de Royal Enfield apuesta por la sencillez y eso se traslada a todos sus aspectos.
Sorprendentemente, este pequeño motor monocilíndrico que está refrigerado por aire no transmite apenas vibraciones durante la marcha. De manera tradicional, los motores con esta configuración suelen tener ese inconveniente que en ocasiones llega a ser molesto, sobre todo sui estamos un buen rato subidos a ella. Sin embargo, aunque lo subamos de revoluciones estas vibraciones se mantienen en el plano de lo normal gracias al eje de equilibrado que tiene el propulsor. Además, los diseñadores de la moto han hecho un esfuerzo para que la Meteor 350 ofreciera una conducción suave y agradable que se percibe desde los primeros kilómetros. En este campo aporta también su parte la gestión electrónica, que ayuda a que el ralentí sea muy estable y a que las aceleraciones y la respuesta al puño del gas sea directa pero no brusca.
Uno de los puntos más sorprendentes es la comodidad que aporta el motor, que apenas vibra
Con un motor con poca potencia, como es el caso de la Royal Enfield Meteor 350, jugar bien con el cambio de marchas es vital si queremos que la moto responda bien cuando toca. En ese sentido, la 350 mantiene el tipo de manera muy satisfactoria, entrando las marchas de manera muy suave y sencilla. Una de las características de esta caja de cambios de 5 velocidades que más nos gustó está precisamente fuera de ella y es la palanca de cambios doble de estilo punta-tacón, que además de estar en una posición buena hace más divertida la conducción recordando el estilo de algunas motos clásicas que llevaban este sistema hace años.
Si el motor y la caja de cambios funcionan al unísono para conseguir que la moto sea sencilla de llevar, la parte ciclo persigue ese mismo objetivo. Normalmente los usuarios del carnet A2 no cuentan con una pericia abultada y teniendo en cuenta que la Meteor está claramente enfocada para ser una buena opción para ellos, conseguir que la moto fuera estable y a la vez tuviese unas reacciones nobles era una prioridad en su diseño. Al final, en una moto de este estilo lo primordial es hacerla accesible a todos los niveles y para ello, en Royal Enfield han sido muy fieles a su estilo con un bastidor de doble cuna de acero tubular que combina la resistencia y robustez con la facilidad para hacer que la moto entre bien en las curvas, de manera noble y que a la vez sea cómoda en las rectas cuando se circula a una mayor velocidad. El conjunto de la moto alcanza los 191 kg, siendo la reducida altura del asiento -765 milímetros- un detalle en el que la marca ha insistido mucho.
Si nos detenemos en las suspensiones, nos queda claro que para conseguir el equilibrio entre rendimiento y contención de costes hay que recurrir a componentes que no son de última tecnología. Sin embargo, eso no significa que no sean componentes que alcanzan un nivel de funcionamiento que puede ser el apropiado y necesario para lo que se espera de ellas. En el tren delantero, la Meteor equipa una horquilla convencional de 41 milímetros de diámetro, mientras que en el tren trasero dispone de un doble amortiguador. A pesar de que no existe ningún tipo de regulación o ajuste posible en la horquilla, la verdad es que el tarado que viene de serie es lo suficientemente duro como para que la moto tenga unas reacciones nobles cuando le pedimos más en carreteras de curvas y a la vez mantenga una capacidad de absorción buena cuando lo hacemos a bajas velocidades circulando en poblado o ante baches e irregularidades. En cuanto a los amortiguadores, podemos jugar con la precarga y ajustarla en seis posiciones diferentes, lo que nos vendrá muy bien sobre todo cuando queramos llevar pasajero.
Si sumamos el coste contenido al estilo accesible de la moto, previsiblemente funcionará bien en nuestro mercado
Ese mismo concepto es el que siguen los frenos, el de cumplir las necesidades sin grandes florituras. En el tren delantero contamos con una pinza de anclaje axial y doble pistón unida a un disco de 300 milímetros de diámetro, mientras que la rueda trasera es detenida por una pinza monopistón y un disco de 270 milímetros. Ese es uno de los detalles que nos sorprendió en el campo de la frenada, que el disco trasero sea casi igual de grande que el delantero. Sin embargo, pudimos comprobar que para mantener un nivel de frenada óptimo en una ruta de puerto de montaña como la que hicimos en la presentación del modelo viene muy bien contar con su gran apoyo para no forzar el freno delantero y que, de esta manera, no se venga abajo y mantenga su capacidad en niveles altos. Otro punto a su favor es el ABS de doble canal.
Llegados a este punto, el último aspecto que falta por valorar de la nueva Royal Enfield Meteor 350 es el del equipamiento, uno de los más amplios para la moto de origen indio.
La Meteor está muy bien equipada para una moto de estas características y precio, con un cuadro analógico digital que es bastante completo. A excepción del cuentarrevoluciones, que no lleva, no le falta de nada: indicador de marcha, modo eco, indicador de gasolina, reloj… y además, en una esfera adicional al cuadro, encontramos el sistema de navegación de Royal Enfield llamado Tripper. Este sistema, una vez conectado con nuestro móvil en el que tenemos que poner el navegador, nos indicará la próxima maniobra a efectuar hasta llegar a nuestro destino mediando sencillas indicaciones de giro y toma de salidas.
Siendo conscientes del atractivo que supone para los usuarios de este tipo de moto el ofrecerles una gran variedad de elementos de personalización, la Meteor 350 se presenta en tres terminaciones: Fireball, Supernova y Stellar. No podemos evitar recuerdos de los años 90, cuando la Yamaha SR 250 lideraba las ventas en España con un concepto de moto muy parecido. De hecho, hasta el sonido de esta Meteor nos traslada a esa época gracias a su “sabor” clásico.
En los modelos Stellar y Supernova, el asiento del pasajero monta un cómodo y estético respaldo. En la Supernova, con un aire mucho más touring, disfrutamos incluso de un parabrisas y de la posibilidad de montar maletas de la propia marca. En resumidas cuentas, la Meteor es una moto que vamos a ver a menudo en nuestras calles, porque con un precio que se situa entre los 4.389 € y 4.589 €, una estética tipo retro-classic y soluciones actuales, atraerá a un gran número de aficionados y usuarios de moto.