Yamaha fue una de las primeras marcas en ver el potencial de la categoría de acceso que estaba compuesta por las motos de 300 centímetros cúbicos y lo hizo de la mano de dos de sus familias más exitosas, la de la Saga R con la R3 y la de la MT, con la MT-03. De esta manera, el concepto Master of Torque encontró en su versión de 300 c.c. una moto capaz de atraer a todos esos usuarios que comenzaban a buscar más en sus motos y que no se conformaban con la utilidad, queriendo también prestaciones y atractivo visual. La nueva Yamaha MT-03 2020 llega para seguir confirmándolo.
Ahora, la firma japonesa ha renovado su MT-03 y lo ha hecho potenciando todavía más sus principales características. El primero de esos campos potenciados es el del diseño estético, que ha sido renovado buscando una similitud más cercana a la de los modelos más grandes dentro de la familia, como la MT-09. La Yamaha MT-03 2020 tiene un corte más agresivo, viéndose favorecido por el desplazamiento de la masa hacia el tren delantero y con el ajuste más compacto de la moto.
El nuevo depósito de 14 litros de capacidad, unido a las tomas laterales, ha ayudado también a esa nueva apariencia de la mediana moto japonesa. Bajo ellos, está el motor de 321 centímetros cúbicos repartidos en dos cilindros. Este propulsor ha sido revisado, buscando una mayor suavidad a bajas revoluciones. Así mismo, se ha buscado que las vibraciones sean mínimas para una mayor sensación de confort durante la marcha.
En cuanto a la parte ciclo, la nueva horquilla delantera es una de los mayores cambios de la MT-03. La hyper naked para el carnet A2 equipa en su nueva versión una horquilla telescópica invertida de 37 mm de diámetro. De esta manera, la naked sigue los pasos de su hermana deportiva en este sentido. Con ello se ha buscado una mejor adaptación a la carretera y un mejor comportamiento tanto en conducción más deportiva como en el día a día.
En el tren trasero también han trabajado los ingenieros japoneses, dotando a la MT-03 con un nuevo basculante asimétrico que tiene una longitud mayor que el de su antecesora. De esta manera, se ha centrado el punto de anclaje y se ha buscado un mejor comportamiento de la moto. Para completar esta mejora, el amortiguador trasero ha recibido nuevos ajustes en precarga y dureza del muelle para hacerlos más rígidos.
Deportividad y estética sumada a utilidad en el día a día
En la búsqueda de potenciar esa sensación deportiva, el chasis ha sido revisado para que el carácter de la moto sea más ágil y rígido. Con una construcción multitubular de tubos de acero, se ha intentado reducir al máximo el peso, apoyándose también en la mejora de las suspensiones nuevas y en la utilización del motor como parte estructural.
_builder_version=»3.29.3″
Todo este conjunto ha hecho que la posición de conducción se haya visto mejorada, tratando de transmitir sensaciones deportivas pero manteniendo una comodidad propia de una moto de manillar alto y con el asiento de altura reducida. Esto es una de las mayores ventajas a la hora de utilizar la moto para desplazamientos diarios, uno de los objetivos que mejor cubre la MT-03.
En el plano del equipamiento, la moto japonesa equipa una doble luz de posición en cuyo centro se encuentra el pequeño faro LED. Así mismo, los intermitentes también son de este tipo. Por su parte, el cuadro de instrumentos es LCD, mostrando toda la información necesaria.