Cuando hablamos de motos eléctricas, queramos o no la mayor parte de las veces nuestra mente se dirige a las ya tan extendidas y comunes scooters que utilizan la electricidad como fuente de energía. Cualquiera que viva en una ciudad o localidad con un elevado número de habitantes sabrá de lo que hablamos sin necesidad de hacer un esfuerzo. Sin embargo, el sector está en constante evolución y esta Tinbot ES1-X Pro es una buena muestra de ello.
Luchar en este segmento es muy difícil por el elevado número de modelos que existen actualmente en el mercado, pero si nos vamos al offroad, esta moto no tiene prácticamente rivales gracias a su concepto de moto de enduro destinada a los usuarios del carnet de coche o del A1 que si bien quieren tener una moto eléctrica, no quieren renunciar a disfrutar del campo con ella.
Para poder adaptarse a estas condiciones que distan tanto de lo que suele ser habitual para las motos eléctricas, la Tinbot tiene un diseño que une las principales características técnicas de una moto de offroad -como las suspensiones de largo recorrido, los neumáticos de tacos o la llanta delantera de gran diámetro- con las propiedades más habituales de las motos eléctricas como los modos de potencia. ¿El resultado de este experimento? Pues desde luego, llamativo cuanto menos.
Equipamiento:
Botas: O´Neal RMX
Casco: Scorpion VX22-Air
<<La Tinbot ES1-X Pro es una de las motos offroad más respetuosas con el medio ambiente>>
Si las motos eléctricas suelen ser las más respetuosas con el medio ambiente en las ciudades, donde se encuentran más cómodas por sus características y limitaciones, cuando nos trasladamos al campo este respeto es todavía mayor. Es difícil imaginar una situación en la que podamos pasar más inadvertidos respecto a los animales y las plantas que cuando nos subimos a una moto como la Tinbot ES1-X Pro. Su nivel de emisiones sonoras es muy inferior al de una moto con motor de combustión interna, siendo el ruido de su cadena de transmisión el más llamativo.
Por su parte, el motor sin escobillas de 10 kW de potencia es igualmente silencioso, teniendo un comportamiento muy agradable gracias a una gestión de la entrega de potencia muy apropiada para una moto de este tipo. El primer toque del acelerador es suave independientemente del modo de potencia que tengamos seleccionado en ese momento, algo que se agradece sobre todo en zonas donde el agarre es escaso. Donde sí se nota mucho la diferencia entre los tres modos de potencia es en el desarrollo que tiene la moto, notándose más llena según vamos pasando del ECO a los dos modos superiores. En el más agresivo podremos alcanzar los 96 km/h de velocidad máxima, un valor nada despreciable teniendo en cuenta que es una moto enfocada a su uso fuera del asfalto.
Como es lógico, la autonomía va menguando a medida que las prestaciones del motor van aumentando. Si nos quedamos en el ECO, que en muchas ocasiones es más que suficiente para un trayecto cómodo y relajado por los caminos, podremos alcanzar los 130 kilómetros de recorrido. Si comenzamos a escalar en los modos de potencia, esa autonomía se verá recortada sensiblemente, aunque la diversión se verá incrementada.
<<La doble batería de la Tinbot ES1-X Pro es una de sus claves>>
Para alimentar al motor, la Tinbot ES1-X Pro dispone de dos baterías independientes que trabajan de manera conjunta. Aunque podemos extraerlas y cargarlas de manera independiente, lo mejor y más cómodo es cargarlas de manera simultánea cuando están montadas en la moto. Para ello, basta con conectar el cargador a la toma que se encuentra en la zona delantera del asiento y esperar unas 5 o 6 horas. En este tiempo ambas estarán completas, dándonos la moto la lectura del conjunto en cuanto a su porcentaje de carga en todo momento. Cada una de estas dos baterías de litio pesa 12,3 kg, pudiéndose recargar dentro de su vida útil hasta 1.500 veces.
El peso del conjunto se mantiene bastante a raya en unos más que respetables 109 kg en total. Con este peso, la Tinbot ES1-X Pro es una moto maniobrable y fácil de levar, girando de manera previsible sobre todo cuando se encuentra sobre la tierra. Cuando circulamos por asfalto, cosa que se puede hacer sin problema, la moto se encuentra menos cómoda como es lógico teniendo en cuenta su tipología.
Un punto muy a su favor es que las suspensiones son regulables, algo que puede ayudar mucho a adaptar sus reacciones tanto a nuestro peso como a nuestras intenciones. De serie, el tarado es algo blando, ideal para ir muy relajado por los caminos, pero se puede endurecer de manera sencilla. Eso sí, no podemos perder de vista que estamos ante una moto diseñada para trabajar de manera correcta en pistas de arena sin demasiadas irregularidades. En ese caso, deberemos pensárnoslo bien antes de coger un bache o reguero a velocidades elevadas, ya que la moto puede sufrir ante este tipo de irregularidades si no tenemos cuidado.
<<La Tinbot ES1-X Pro está pensada para un uso relajado y cómodo>>
De la misma manera, tenemos que tener muy presente que la moto tiene capacidad para superar inclinaciones del terreno de hasta 20 grados. Esto, que puede pasar por alto para muchos usuarios, es una de las mayores limitaciones que tiene esta moto eléctrica de Tinbot, ya que ante escalones, zanjas o subidas pronunciadas no tiene la capacidad de avanzar, cortándose su potencia para evitar dañar sus componentes internos. Sin ninguna duda, es en los caminos lisos o con poca pendiente donde la moto muestra su mejor versión, siendo realmente divertida.
En cuanto a sus frenos, la Tinbot ES1-X Pro dispone de un disco delantero de 240 milímetros al que se suma uno trasero de 210 mm. En ambos trenes la frenada es apropiada, pero debemos tener en cuenta que la moto equipa un sistema de frenada combinada que nos puede dar algún pequeño susto si queremos por ejemplo frenar sólo con el freno trasero como en algunas ocasiones es habitual en la práctica del offroad. En ese caso, aunque nosotros sólo apliquemos presión en la maneta izquierda, la moto frenará también de delante.
A la hora de valorar el equipamiento, la ES1-X Pro mantiene un nivel apropiado para una moto de esta categoría. Además de las ópticas Full LED, la moto dispone de un cuadro de instrumentos LCD que muestra toda la información necesaria de manera visual y sencilla. Así mismo, equipa un sistema de llave inteligente que se suma a la llave convencional que se puede insertar en el bombín. El sistema de alarma es un extra que siempre viene bien.
Con todo esto, la Tinbot ES1-X Pro es una moto que está llamada a abrir un camino poco explorado todavía y que supone todo un reto para la movilidad eléctrica. Con un precio de 5.995 euros -que puede verse sensiblemente rebajado gracias a las distintas ayudas gubernamentales y de las Comunidades Autónomas y los Ayuntamientos, la ES1-X Pro está disponible en color negro y en color blanco.