A veces, ciertas acciones o comportamientos que pueden parecer totalmente inofensivos pueden acabar con una multa como resultado. Ese es precisamente el caso de poner accesorios o fundas a un casco, modificando así sus características y haciendo que no permanezcan en el estado original en el que han sido homologados para su utilización.
En el mundo de las motos las modificaciones están a la orden del día, en todos y cada uno de los campos. No es nada extraño ver motos de todo tipo con cambios que ha hecho su propietario para diferenciarla estéticamente o para ganar prestaciones o funcionalidad. Sin embargo, hay modificaciones que no se hacen en la moto, sino en el equipamiento. Usar fundas sobre el casco es una de ellas y puede acabar con un “regalo indeseado” por parte de las autoridades.
Uno de los mejores ejemplos de ello lo han protagonizado los policías municipales de Las Palmas de Gran Canaria, que han avisado a sus ciudadanos de las consecuencias que puede tener colocar uno de estos accesorios al casco. La clave de la posible multa está en que estas fundas, que en algunas ocasiones son bastante estrafalarias, pueden alterar las condiciones en las que el casco ha sido homologado.
Algunas veces vemos pinturas, diseños y forros simpáticos como este🐰, pero no será tan gracioso si se mueve con el viento y te limita la visibilidad.
— Policía Local LPA (@PoliciaLPA) July 2, 2023
Tenlo en cuenta cuando incorpores a tu casco accesorios como estos, pueden comprometer la #SeguridadVial pic.twitter.com/kEXs17lODC
El uso “adecuado” del casco homologado es la clave
El reglamento especifica que los usuarios de motos -y de algunos otros tipos de vehículo- deben utilizar cascos homologados de manera “adecuada”, entrando aquí en juego el efecto que estos accesorios puede tener en ese uso que se considera adecuado. Es cierto que estas fundas pueden llegar a moverse, dificultado la visión. También que pueden producir efectos indeseados en caso de caída, como alterar el deslizamiento o engancharse con consecuencias nada divertidas.
En cualquier caso, la sanción puede llegar o no en función de la interpretación del agente en cuestión, que si considera que el accesorio modifica las condiciones de la homologación procederá a poner una multa de 200 euros. Al fin y al cabo, hay cosas con las que es mejor no jugársela por pura estética y la seguridad es una de ellas.