La tecnología es casi siempre uno de los mejores aliados a lo largo de la historia, ya que suele hacer que todo sea más fácil cuando se cuenta con ella de nuestro lado. Eso es precisamente lo que pasa cuando hablamos de las motos, que cada día cuentan con más sistemas diseñados y pensados para ponerlo todo más fácil o hacerlo más seguro. Uno de los puntos más comprometidos a la hora de circular sobre dos ruedas es la frenada y para mejorar en este sentido hay dos sistemas que conviven en la actualidad y que trabajan de manera diferente. Sin embargo, muchas veces surge la duda: ¿es mejor el ABS o la frenada combinada?
Lo primero que debemos tener claro antes de afirmar si es mejor el ABS o la frenada combinada a la hora de elegir nuestra moto es saber qué son cada uno de estos dos sistemas y cómo trabajan. Aunque los dos están pensados para hacer que las frenadas sean más seguras no tienen nada que ver el uno con el otro, siendo muy diferentes sus funciones y el efecto que estas tienen.
La frenada combinada, o CBS como se suele denominar de manera más técnica, es un sistema que reparte la presión que ejercemos sobre uno de los frenos de nuestra moto para que se aplique sobre ambos trenes. De esta manera, al frenar sólo con el freno trasero la moto automáticamente frenará también la rueda delantera de manera más leve.
El objetivo de esto es que la moto se mantenga estable durante la frenada, evitando que un usuario con poca experiencia la desequilibre si frena bruscamente. La parte negativa es que, aunque hace que caerse sea más difícil, no evita que las ruedas se bloqueen. Lo que sí hace es reducir la distancia de frenado en situaciones normales.
Para saber si es mejor el ABS o la frenada combinada debemos analizar cada uno de los sistemas
Por su parte, el ABS funciona de una manera más específica y limitada, ya que no entra en acción siempre en todas y cada una de las frenadas que hacemos. Este sistema, que en automoción lleva muchos años instaurado y que en las motos cada vez es más común, hace que por mucha presión que apliquemos a los frenos las ruedas nunca se bloqueen, eliminando así una buena parte del riesgo de caída.
El ABS se compone de una serie de sensores instalados en la rueda que detectan si se detiene por completo, enviando esa información a un módulo que reduce la presión ejercida sobre las pinzas de freno si interpreta que está a punto de bloquearse la rueda. Al hacerlo, se evita que pierda la adherencia, haciendo que la frenada sea infinitamente más segura.
Si bien sobre el asfalto seco es ya una gran ayuda, su importancia se multiplica en caso de encontrarnos asfaltos con poca adherencia por desgaste, por lluvia o por la presencia de elementos como las marcas de pintura, arena, aceite o cosas similares. Lo ideal es que este sistema ABS sea de doble canal y que actúe de manera independiente en cada una de las ruedas de la moto.
Teniendo esto en cuenta, si nos ponemos del lado de la seguridad antes de valorar si es mejor el ABS o la frenada combinada queda claro que el ABS es mucho más interesante, aunque también es más caro y por eso muchas motos de coste contenido y baja cilindrada optan por el sistema de frenada combinada.