Comprar una moto de segunda mano puede suponer muchas ventajas. Sin embargo, hay que tener cuidado con algunos detalles, en especial de tipo administrativo. Para estar tranquilo, es de mucha utilidad cómo saber si una moto tiene multas pendientes.
El mercado de segunda mano de motos es un mercado muy atractivo y que cada día está más al alza. Los buenos precios unidos a que las motos cada vez son más fiables a largo plazo están ayudando mucho a su crecimiento. Pero no todo es siempre tan bonito y fácil como parece. Es vital tener claro cómo saber si una moto tiene multas pendientes. El anterior propietario puede haber cometido infracciones que quedan asociadas a la moto. Y eso puede generar problemas y darnos muchos dolores de cabeza en el futuro.
Es muy común fijarse hasta el último detalle mecánico antes de comprar una moto usada. Pero también es bastante común que se pase por alto la situación administrativa e incluso financiera de la moto. Este hecho nos puede traer muchos problemas. Un vehículo de segunda mano puede tener multas pendientes e incluso embargos o deudas asociadas. En algunos casos, con su compra pasaremos a ser los responsables de dichas sanciones y deudas.
Lo mejor que podemos hacer para saber cuál es el expediente de la moto es acudir a la jefatura Provincial de Tráfico y solicitar el informe del vehículo. Con facilitar la matrícula y pagando las tasas correspondientes, la DGT nos dirá su situación y las sanciones que pesan o no sobre la moto.
También es ideal conocer si sobre la moto pesa algún embargo o alguna deuda a nivel financiero. La manera de salir de dudas es acudiendo al Registro de Bienes Inmuebles y solicitar también el informe correspondiente. Aunque nos cueste algo de dinero, de esta manera estaremos 100% seguros de lo que estamos comprando.
De no hacerlo, nos exponemos a que nos exijan a nosotros el pago de las multas o del embargo o que nos sea imposible hacer el cambio de titular en Tráfico.