Suzuki sigue luchando por dejar atrás los fantasmas y salir adelante tras los problemas de los últimos tiempos. Ahora podría estar barajando entrar en un segmento en el que hasta el momento no había entrado, el de las motos neo-retro.
Desde que todo se volviera en contra de sus planes y Suzuki tuviera que reestructurar toda su marca y no solamente el departamento de carreras la firma japonesa no para de remar. De hecho poco a poco va sacando la cabeza con proyectos interesantes y alguno de ellos, como su participación en las 8H de Suzuka con una moto experimental de bajas emisiones, han llamado la atención.
Pero ahora no hablamos de grandes deportivas ni tan siquiera de sus divertidas y esperanzadoras Suzuki GSX-8S y GSX-8R, hablamos de que Suzuki podría estar planeando ir en otra dirección que no contemplaban hasta el momento. Se trata de entrar en el mercado de las moto neo-retro.
En los últimos años es un mercado que ha ido creciendo y aunque en su momento tuvo algunos grandes impulsores, ahora prácticamente todas las marcas tienen una o varias motos de corte neo-retro. Es decir, motos con prestaciones y tecnologías actuales pero con un diseño que nos recuerda tiempos pasados.
Quizás en el EICMA podamos verla… o quizás no
En el caso de Suzuki vimos la reinterpretación de la Suzuki Katana y eso podría considerarse el primer intento, aunque realidad era más un “remaque” que una moto neo-retro propiamente dicha. Además no tuvo mucho éxito comercial a pesar de todo el interés que levantó en la gente antes de salir al mercado.
Por ahora no parece descabellado que esta nueva neo-retro llegue y lo cierto es que incluso utilizando la base de las anteriormente mecionadas GSX-8S/R podría ser relativamente sencillo. Aunque lo mejor es que ante la pregunta de los compañeros de Moto-Station a Suzuki Francia solamente recibieron la respuesta de: “estamos demasiado cerca de EICMA para responder a esa pregunta”.
¿Eso significa que en EICMA podremos ver la nueva neo-retro de Suzuki? No tiene por qué, al fin y al cabo sería interpretar una respuesta. Aunque el hecho de no cerrar las puertas y viendo que están intentando con todas sus fuerzas abrirse de nuevo un hueco en el mercado tampoco es descartable. Así que ponemos el cronómetro en marcha hasta el EICMA y a esperar…