El avance de la tecnología en el mundo de las dos ruedas permanece imparable y el último invento en llegar a esta interminable lista es el Y-AMT, el nuevo sistema de cambio de marchas automático que ha lanzado Yamaha tras un arduo trabajo de investigación y desarrollo por parte del equipo de ingeniería de la firma japonesa.
No es ningún secreto que las firmas tecnológicas llevan años apostando por hacer todo más sencillo en cualquier ámbito. La sociedad avanza hacia ese punto en el que cuantos menos procesos se tengan que hacer, mejor es el resultado. En ese sentido, la conducción de las motos no es una excepción y las marcas trabajan en hacerla cada vez más simple. Este sistema Y-AMT es una buena prueba de ello, uniéndose a otros sistemas parecidos lanzados recientemente como el de BMW.
El objetivo de este sistema de cambio de marchas automático no es otro que el de ofrecer a los usuarios la posibilidad de simplificar sensiblemente el trabajo sobre la caja de cambios para adaptar el régimen de giro del motor a las necesidades de cada momento. Sin embargo, mientras que otros sistemas se encaminan a ofrecer una máxima comodidad con una conducción suave el Y-AMT prima sobre todo la conducción deportiva.
El Y-AMT llegará para permitir que la conducción deportiva sea más sencilla sin perder emoción
El principal argumento de este sistema de cambio automático es el de dejar que la moto se encargue de seleccionar la marcha adecuada en cada momento de manera autónoma. Sin embargo, hacer eso a tiempo completo anularía parte de ese espíritu deportivo que se quiere mantener. La solución ha sido sencilla, dotar al sistema de un modo completamente automático y de otro manual, nunca mejor dicho.
El término manual en este caso está más que justificado ya que el Y-AMT prescinde por completo de la palanca de cambio situada habitualmente en la estribera izquierda. Además, se prescinde igualmente de la maneta de embrague. Con esta situación, el sistema implementa algunos botones en la piña izquierda, en el manillar, desde los que se controla todo lo necesario.
Gracias a esos botones se puede seleccionar en primer plano el modo que se quiere utilizar. Por un lado está el AT, que es completamente automático y con el que sólo hay que preocuparse de acelerar, frenar e inclinar la moto. Si por el contrario queremos tener algo más de control, se puede seleccionar el modo MT, en el que nosotros seremos los encargados de ir cambiando de marchas cuando queramos a través de las pulsaciones de los botones + y –.
Con la intención de ser lo más flexible posible, el modo automático tiene a su vez dos modos diferentes, el “D” y el “D+”. La diferencia entre estos dos modos es que el “D+” está diseñado para exprimir más el motor en una conducción deportiva, mientras que el “D” está pensado para ofrecer una conducción tranquila y más eficiente, con cambios de marcha más conservadores.
Para poder actuar sobre la caja de cambios convencional, el Y-AMT utiliza dos servomotores eléctricos que hacen exactamente lo mismo que harían la mano izquierda y el pie izquierdo sobre el embrague y sobre el selector de marchas. De esta manera, la ECU de la moto interpreta los datos en cada momento y da las órdenes necesarias para que esos actuadores eléctricos se muevan cuando corresponde. El peso del conjunto es de sólo 2,8 kg, por lo que apenas se notaría dinámicamente su presencia en la moto.
Por el momento la firma de los tres diapasones no ha confirmado en que modelos se montará el sistema ni cuándo llegará al mercado, aunque es de suponer que se podrá ver en modelos como los de la familia MT y tal vez el año que viene.