Todo el mundo sabe que montar en moto conlleva una serie de riesgos. Pero también es conocido que esos riesgos se pueden minimizar o ampliar en función de nuestra actitud cuando nos subimos a ella. Pues bien, si hay algo claro es que el protagonista de este video entra de lleno en esa segunda opción mientras pilota su BMW S1000RR en Nürburgring.
Pocas presentaciones necesita el mítico y espectacular circuito de Nürburgring Nordschleife. Espectacular, mítico y, sobre todo, peligroso hasta tal punto que su sobrenombre es el Infierno Verde. Cualquiera hoy en día puede desplazarse hasta sus instalaciones, pagar la entrada y dar una vuelta emulando a los pilotos más valientes de las décadas 70 y 80. Simultáneamente ruedan motos, coches, furgonetas y todo tipo de artefactos a motor.
Este cóctel tan peculiar se convierte en un cóctel directamente explosivo cuando sumas esos datos a una actitud de ir buscando una vuelta rápida. Eso es precisamente lo que hace el protagonista del video, que se desliza a toda velocidad por las curvas esquivando coches a pocos centímetros y exprimiendo al máximo las capacidades de su BMW S1000RR. Afortunadamente, tanto él como su moto salen de una pieza. Algo que dudosamente hubiese sucedido si llega a tener el más mínimo problema pilotando de esa manera tan arriesgada…
