En el arranque de la presente temporada se inauguró un nuevo formato, la parrilla invertida. Ahora, unos meses después, cabe la posibilidad que desaparezca en el WorldSBK 2018.
Que el Campeonato del Mundo de Superbikes no atraviesa su mejor momento no es una novedad. Por eso sus gestores plantean nuevos cambios de cara al WorldSBK 2018. Después de probar con las carreras el sábado, este año llegó la parrilla «invertida». Realmente no es invertida, pero sí mezcla a los nueve primeros clasificados. El caso es que pasada media temporada parece que la idea no termina de cuadrar.
Hasta la fecha, el invertir el orden no ha dado el espectáculo esperado. Pero tampoco ha servido para ver a pilotos privados ganar carreras. De hecho, el subir al podio sigue siendo un coto privado. Parece claro que el problema no está en el orden de parrilla. No hay más que ver las clasificaciones para poder comprobarlo. Rea, Sykes, Davies y Melandri están muy lejos del resto, independientemente de su puesto en parrilla.
Esta situación desvela una dura realidad y es que únicamente hay 2 motos capaces de ganar. Una es la Kawasaki ZX10RR y otra la Ducati Panigale. Los responsables de Dorna, gestores del campeonato, están barajando diferentes opciones. Entre ella está la de dejar de modificar la parrilla, pero también incluir nuevas modificaciones. El propio Carmelo Ezpeleta ha hablado recientemente sobre la necesidad de acercar las motos a la serie.
Es probable que de cara a un futuro no muy lejano se introduzca la electrónica única. Ya ha demostrado su efectividad en MotoGP y en el BSB. Los conceptos en ambos campeonatos son muy diferentes, pero en ambos han fomentado la igualdad. Al fin y al cabo, las motos de hoy en día tienen mucho de electrónica. El futuro del WorldSBK está en juego.