Después de un inicio de temporada realmente espectacular e imprevisible, los pilotos del Mundial de MotoGP tienen en Le Mans la quinta cita de la temporada. Se trata de un circuito de la vieja escuela, con desniveles, curvas rápidas y lentas y en el que en el pasado se han podido ver grandes carreras.
Este año, más aún después de lo acontecido en las cuatro primeras rondas, el GP de Francia se plantea como un todo o nada para los principales pilotos de la parrilla. Valentino Rossi defenderá el liderato frente a un Maverick Viñales que suma dos fines de semana consecutivos sin lograr grandes resultados y lapidando la ventaja que logró en Qatar y Argentina. Por su parte, tanto Marc Márquez como Dani Pedrosa llegarán pletóricos después del fin de semana de Jerez y de ver como de nuevo están metidos en la lucha por los primeros puestos.
A tenor de lo visto en estas primeras carreras y sin olvidar que corre en casa, habrá que tener en cuenta a un Johann Zarco que está siendo la sensación de este arranque de campaña. Jorge Lorenzo, con el sabor del cava del GP de España aún reciente, intentará seguir con la línea ascendente mostrada en los últimos fines de semana.
