Ópera y drama, silbidos y rock & roll, lógica y pasión, notas, decibelios, altas prestaciones junto a tecnología de última generación, titanio y circuito de velocidad. El prestigioso constructor de escapes esloveno Akrapovic, todo un referente en la actualidad, se desmarca de la competencia con un vídeo que homenajea a las últimas superbikes matriculables, esas que nos quitan el sentido y roban nuestros sueños cada vez que las vemos.
Aprilia RSV4, BMW S1000RR, Ducati 1299 Panigale, Honda CBR1000RR, Kawasaki Ninja ZX-10R, Suzuki GSX-R 1000, Yamaha YZF-R1… son los cuerpos, el titanio de Akrapovic hace de mente. El último vídeo oficial de la marca eslovena muestra por qué cambiar el escape de nuestra moto es la modificación más habitual entre los motoristas de todo el planeta, independientemente del modelo, experiencia o segmento del que hagan gala.
Con 27 años a sus espaldas y una plantilla actual de 450 trabajadores, Igor Akrapovic puede estar más que satisfecho de los resultados obtenidos. No hay que olvidar que comenzó en 1990 bajo la marca Skorpion (puso su apellido en 1997) junto a cinco amigos más… ¿Por qué? La escasa calidad de los tubos de escape disponibles para el público generalista a finales de los ’80 en comparación con los usados por los equipos de carreras profesionales encendió la chispa. Ahora, los equipos más prestigiosos y los usuarios más exigentes no dudan en rendir pleitesía a la que, hoy por hoy, es la marca de escapes que marca la pauta por calidad de fabricación, materiales y rendimiento. Comenzó en 1990 bajo la marca Skorpion y cinco amigos más… El año pasado ya lanzaron una serie especial de 25 unidades en color negro con logotipo especial para celebrar su cumpleaños, todo un detalle para los más pudientes.
«Amor Puro» hacia monstruos de 30.000 euros y más de 200 CV que entonan su bella melodía a ritmo de gas, así sí…